De acuerdo con la investigación, el 15 de noviembre de 2019, en una reunión entre las entonces autoridades se tomó contacto con la Policía de Ecuador y se acordó la entrega de armamento no letal a Bolivia.
Las regiones más afectadas son los departamentos de La Paz y Cochabamba, aunque también se reportan daños considerables en Chuquisaca y Potosí.