La planta laminadora, de propiedad de inversionistas asiáticos, genera más de medio centenar de empleos en la región, por lo que el impacto económico y social del siniestro es significativo.
Un voraz incendio se desató la tarde de ayer sábado en la fábrica de láminas LID, ubicada a 7 kilómetros de Ascensión de Guarayos, en la carretera hacia Santa Cruz. Las llamas, que comenzaron alrededor de las 15.00, han generado cuantiosas pérdidas económicas, estimadas en más de un millón de bolivianos.
Según informó Nataly Cairo, administradora de la planta, el siniestro se habría originado por un posible cortocircuito.
“Ya van más de cuatro horas y no hemos podido sofocar las llamas. Solo conseguimos un carro bombero de la Asociación de Madereros. La municipalidad no nos ha proporcionado apoyo”, declaró a El Deber. Sin embargo, el alcalde Robert Schok aseguró que un equipo de bomberos municipales acudió al lugar.
Entre los bienes afectados por el incendio se encuentran tres tráilers cargados con urea y cuatro con harina, todos calcinados. Afortunadamente no se reportan daños personales. “Gracias a Dios no hubo víctimas. Estamos aplicando protocolos de seguridad porque el humo que despiden las llamas es altamente tóxico”, señaló Cairo.
La planta laminadora, de propiedad de inversionistas asiáticos, genera más de medio centenar de empleos en la región, por lo que el impacto económico y social del siniestro es significativo.
La planta de laminado LID no solo representa una fuente de empleo directo para sus trabajadores, sino que también dinamiza la economía local al generar demanda de transporte, servicios logísticos y materia prima proveniente de la región.
AEP