Estas son las propuestas electorales para resolver la escasez de dólares rumbo a las elecciones del 17 de agosto.
Acudir al Fondo Monetario Internacional (FMI); el control, regulación y retorno de divisas comerciales; sinceramiento patrimonial de bienes en el país o en el exterior de los bolivianos y la venta anticipada de litio está entre las propuestas electorales para resolver la escasez de dólares rumbo a las elecciones del 17 de agosto.
De acuerdo con datos del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, desde 2023 Bolivia tiene un déficit de divisas por $us 1.219 millones porque, mientras cumple con el pago de la deuda externa, no logra acceder a dólares de los créditos ya aprobados por organismos financieros internacionales pero bloqueados en la Asamblea Legislativa que ya supera más de $us 1.840 millones a abril de este año.
Para revertir esta situación, las organizamos políticas plantean diversas alternativas. Por ejemplo, Alianza Unidad propone en su programa de gobierno revisar “los créditos aprobados y no desembolsados y/o utilizados, que aproximadamente llegan a los 3.500 millones de dólares”.
Su objetivo es cambiar “el rumbo de estos préstamos para el Fondo de Estabilización que comience a devolver los dólares a las empresas y ciudadanos”.
Pero, además, plantea un “Programa de financiamiento externo” que incluye gestionar “acuerdos financieros con el Fondo Monetario Internacional y otros organismos multilaterales para inyectar recursos frescos a la economía, recuperar reservas internacionales y respaldar el ajuste macroeconómico”.
En tanto, la alianza Libre propone recurrir al FMI para acceder a “entre 2 mil millones y 4 mil millones de dólares” y al Fondo Latinoamericano de Reserva (FLAR), Banco Mundial (BM), Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Corporación Andina de Fomento (CAF) para acceder a préstamos de entre $us 3.000 millones y $us 6.000 millones.
Además, plantea renegociar la deuda externa.
El gobernante Movimiento Al Socialismo Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP) plantea “implementar mecanismos eficientes para el control, regulación y retorno de divisas comerciales, asegurando un registro preciso de las exportaciones nacionales y una gestión transparente del flujo de divisas generadas, con el objetivo de fortalecer la estabilidad económica y el desarrollo productivo del país”.
La Alianza Popular, por su parte, propone “generar divisas mediante la promoción estratégica de exportaciones”, para ello se impulsará créditos concesionales para “exportadores, gestionado a través del Banco de Desarrollo Productivo (BDP), bajo la condición de repatriar las divisas obtenidas” y también se renegociará la deuda externa para “extender plazos y mejorar condiciones financieras”.
“Se priorizará el acceso a créditos multilaterales concesionales, con tasas bajas, largos plazos y objetivos productivos claros”, refiere su programa de gobierno.
El Partido Demócrata Cristino (PDC) plantea en su programa la “creación del Fondo de Estabilización Cambiaria, para unificar el tipo de cambio, a partir de recursos de libre disponibilidad negociados con Bancos Multilaterales, el alivio de los flujos de salida de divisas por la renegociación de la deuda externa y nuevos recursos provenientes de programas de sinceramiento patrimonial de bienes en el país o en el exterior, tales como dinero en efectivo, cuentas bancarias, inmuebles, automóviles, criptoactivos y créditos, entre otros”.
Mientras que Libertad y Progreso ADN propone “reducir el gasto público, reducir alícuotas e impuestos, desregular tanto importaciones como exportaciones, defender y aplicar la propiedad privada”.
En cambio, la Alianza Fuerza del Pueblo plantea la “aprobación de créditos externos en la Asamblea Legislativa Plurinacional y que el Gobierno recurra a organismos multilaterales con la finalidad de recibir apoyo financiero”.
Además, de desarrollar proyectos para la emisión de bonos de carbono pues afirma que “el potencial ingreso para Bolivia es de 35 mil millones de dólares hasta el año 2030”.
Mientras que APB-Súmate apuesta por “fomentaremos las exportaciones mediante la eliminación de restricciones administrativas, simplificación de trámites y alivios tributarios orientados a mejorar la competitividad externa”.
Y para lograr el acceso inmediato a dólares, plantea la venta anticipada de la producción de litio conocidos en el sector minero como “offtake agreements”. El frente bautiza su propuesta como “Litiodólares”.
“Estos contratos implican que los compradores se comprometen a adquirir una parte de la producción futura a un precio fijo o bajo una fórmula previamente acordada. A cambio, se proporciona liquidez anticipada para el financiamiento del proyecto. Este mecanismo es particularmente atractivo para empresas que necesitan asegurar el suministro de materia prima a largo plazo, como los fabricantes de baterías”, se explica en el programa de gobierno.
Además, plantea impulsar la “movilización del ahorro interno incentivando a los bolivianos a canalizar sus dólares hacia el sistema financiero formal, mediante instrumentos atractivos, protección al ahorro y el impulso de un entorno de competencia monetaria saludable y transparente”
A diferencia de Súmate, Nueva Generación Patriótica (NGP) plantea “recuperar divisas del mercado interno” aplicar un “nuevo impuesto a operaciones en dólares en el mercado paralelo” y “transformar remesas en créditos productivos”; mientras que Morena apuesta por incentivar la repatriación de dólares con “bonos soberanos atractivos” y, además, crear un “mecanismo de control de contrabando y fuga de divisas”.
ABI